En España, la incontinencia urinaria es la tercera causa de disminución de la calidad de vida tanto en mujeres como en hombres. Se trata de una de las patologías que más afecta al día a día de los pacientes, superando incluso otras enfermedades como la diabetes.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) identifica la incontinencia urinaria como una de las siete causas médicas que necesita mayor atención sanitaria.
Hay que tener en cuenta que la incontinencia urinaria no solo provoca alteraciones físicas, también causa depresión. La gran mayoría de las personas afectadas conviven con el rechazo, la vergüenza, la culpabilidad, la baja autoestima, o incluso el aislamiento social.
El 40% de los pacientes considera que la incontinencia les afecta psicológicamente y les condiciona su vida, incidiendo en ámbitos tan diferentes como el mundo laboral (absentismo), las relaciones sociales o las relaciones sexuales, entre otros.
Se ha convertido en una auténtica epidemia silenciosa que afecta como mínimo a 7 millones de españoles. Quienes la padecen ocultan su problema y no buscan ayuda. También desde las consultas muchas veces se tiene poca sensibilidad y no se le da la importancia que realmente tiene para la vida de los pacientes, considerándolo un tema poco gratificante y de poco interés.La incontinencia se considera uno de los tabús médicos que todavía no se ha conseguido erradicar.
Es hora de romper los tabús y normalizar definitivamente la incontinencia urinaria
Una de las asignaturas pendientes en la atención a personas con incontinencia urinaria, es la necesidad de superar los tabús que siguen rodeando esta patología.De hecho, se trata de creencias que provocan que sea una enfermedad infradiagnosticada e infratratada.
El 40% de los pacientes con incontinencia urinaria tardó más de tres años en ser diagnosticado.
Las personas afectadas conviven habitualmente con muchas emociones y sentimientos negativos. Suelen negar lo evidente y buscan muchas excusas, culpando a factores externos como la edad, el trabajo o el estrés.
Pero en realidad, se trata de una evidente falta de información, ya que la incontinencia urinaria es un problema médico que tiene solución. La mayoría de los pacientes desconocen, más los hombres que las mujeres, que existen soluciones eficaces para vencer este problema. Es necesario trasladar a los pacientes desde cualquier ámbito, que existen herramientas y se puede superar el problema.
La incontinencia urinaria todavía más tabú en el caso de los hombres
Muchas son las barreras que impiden y dificultan que las personas con incontinencia urinaria busquen ayuda, especialmente en el caso de los hombres. Lo que provoca que el problema se suela detectar en un estado bastante avanzado.
Los hombres perciben esta enfermedad como un tema mucho más tabú que las mujeres, al ser más difícil de disimular para ellos. La vergüenza y la baja tasa de consultas fomentan el desconocimiento y les acaba afectando gravemente a su autoestima. Sin embargo, se les puede ayudar a través del tratamiento adecuado según cada caso.
Aparte de los tratamientos farmacológicos y otras herramientas que están al alcance de todos, también existen técnicas específicas muy seguras y poco invasivas que ayudan a los hombres a recuperar el control de la vejiga y poder volver a una vida normal:
- Mallas o cabestrillos quirúrgicos. Cuentan con un 90% de efectividad, y ayudan a reposicionar la uretra permitiendo recuperar el control de la vejiga.
- También existe la posibilidad de insertar un esfínter urinario artificial que permite retener la orina y controlar su expulsión.
Se trata de ejemplos que demuestran que hay soluciones para todos los casos, pero no sin antes haber abandonado los prejuicios y el miedo a preguntar.
Concienciación y normalización de la incontinencia urinaria, la clave para mejorar la vida de los pacientes
Se ha demostrado que educando y concienciando sobre la incontinencia, se puede mejorar la actitud y la percepción, animando a los pacientes a buscar ayuda.
Aunque es una patología que afecta a 1 de cada 20 personas, en la mayoría de los casos es una situación reversible.
Los expertos insisten en la importancia de concienciar a la sociedad sobre la incontinencia urinaria porque en ningún caso debe verse como algo normal. Hay que aprovechar que la población en general y también los pacientes en particular se preocupan cada vez más por su salud y buscan continuamente información sobre sus enfermedades y afecciones. El número de pacientes empoderados ha crecido mucho durante los últimos años.
Es importante contribuir desde todos los ámbitos a normalizar esta situación, informando sobre la patología y todas las soluciones existentes que pueden resolver o aliviar el problema. Para ello, será muy importante la labor educativa de todos los profesionales sanitarios a la hora de promover un cambio de actitud y de percepción en relación a la incontinencia urinaria.
Algunas recomendaciones para trabajar a favor de la normalización de la incontinencia urinaria:
- Implicar a todos los profesionales de la salud para luchar activamente contra una enfermedad oculta.
- Combatir la estigmatización de los que la sufren.
- Generar campañas de concienciación que normalicen la incontinencia urinaria y la presenten como un hecho normal que puede tener solución, recordando siempre la importancia de visitar al médico para poder recuperar la vida diaria.
- Tratar la incontinencia urinaria a través de un abordaje multidisciplinar, donde las diferentes sociedades científicas vayan de la mano.
- Informar sobre los factores de riesgo de la incontinencia urinaria en la mujer (embarazo, menopausia…), así como potenciar la acción sobre la musculatura pelviana como prevención.
- Abordar la incontinencia de manera próxima y empática con un mensaje de tranquilidad.
- Disponer de materiales diversos, folletos u otras herramientas para que los profesionales sanitarios los puedan entregar a sus pacientes.
Aprovechar los nuevos canales disponibles. Estar presentes en las redes sociales y los foros donde las personas afectadas buscan ayuda, es fundamental para que puedan recibir información y consejos útiles, ayudando a combatir los tabús existentes.
La incontinencia supera en número de afectados a otras patologías mucho más conocidas como la diabetes, artrosis o la osteoporosis.
Entre todos podemos darle la importancia que realmente tiene y mejorar la vida de los pacientes.
Bibliografía:
- La OMS identifica la incontinencia urinaria como una de las siete causas médicas que requieren una mayor atención sanitaria. NewsTerceraEdad.com. Noviembre 2020.
- Asociación española de Urología (AEU). Día internacional de la incontinencia urinaria. Presentación Decálogo sobre incontinencia urinaria. Nota de prensa. Marzo 2019.
- Guía de atención a personas con incontinencia urinaria. Asociación Española Urología (AEU). Enero 2020
- El 40% de los pacientes con incontinencia urinaria tardó más de tres años en recibir el diagnóstico. Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS). Marzo 2022
- Asociación española de Urología (AEU). Día internacional de la incontinencia urinaria. El envejecimiento poblacional multiplicará los casos de personas con incontinencia urinaria. Nota de prensa. Marzo 2020.
- El estigma social de la incontinencia urinaria. Infosalus. Marzo 2015.
- Rumbo-Prieto J.M. Intervenciones educativas para crear conciencia en los hombres sobre la salud de la vejiga y los intestinos. Ene Revista de Enfermería. vol.11 no.1 Santa Cruz de La Palma. Abr. 2017.
- La normalización de la incontinencia a través del cómic. Infogeriatría. Noviembre 2017.