La Federación Internacional Farmacéutica (FIP) estableció el 25 de septiembre como el Día Mundial del Farmacéutico en el año 2009, fecha que conmemora el mismo día en que se creó esta organización.
El objetivo de este día es promover y apoyar el papel del farmacéutico a nivel mundial en la labor de prevención de enfermedades, promoción de la salud y seguimiento de los tratamientos.
Aunque la tarea del colectivo farmacéutico es de vital importancia para la salud de las personas, la realidad es que su trabajo no siempre es visible. Por ello, la campaña del Día Mundial del Farmacéutico ofrece la oportunidad de dar visibilidad y promover la labor de la profesión farmacéutica.
La farmacia unida en la acción por un mundo más sano
El lema para el año 2022 “la farmacia unida en la acción por un mundo más sano”, pretende mostrar a todo el mundo el impacto positivo que tiene la farmacia en la salud de las personas, así como fortalecer aún más la solidaridad entre la profesión.
En definitiva, la finalidad es dar valor a la farmacia y comunicar a la sociedad que las acciones de los farmacéuticos se traducen en mejor salud para las personas.
Lema 2019: “Medicamentos seguros y efectivos para todos”
El objetivo era promover el papel del farmacéutico en la seguridad de los pacientes a través del uso de medicamentos y la reducción de errores en la medicación.
Lema 2020: “Transformar la salud global”
Con el reto de la crisis del COVID-19, el mensaje de 2020 quería potenciar la importante labor de los farmacéuticos en el asesoramiento sobre la salud, los consejos sobre medicación, la vacunación, etc.
Lema 2021: “Farmacia: siempre de confianza, al servicio de tu salud”
El objetivo era poner de manifiesto que, en un entorno creciente de desinformación y noticias falsas, las personas confían cada vez más en los farmacéuticos.
Además, no hay que olvidar que el colectivo farmacéutico también ha participado en muchas de las mejoras existentes en el ámbito sanitario. La profesión debe estar muy orgullosa y es importante dar a conocer a la sociedad todas sus contribuciones.
Gracias al seguimiento farmacoterapéutico de los pacientes y a los conocimientos que tiene el farmacéutico de la oficina de farmacia sobre la incontinencia urinaria, se pueden detectar los síntomas cuanto antes, así como observar a los grupos de población más susceptibles de tener síntomas del tracto urinario inferior.
La accesibilidad de la farmacia permite que un problema aparentemente menor, se consulte antes en la farmacia que en la propia consulta médica. Cuando el paciente va al médico, normalmente el problema suele ser mayor y será más difícil de tratar. Gracias a la atención farmacéutica, se pueden identificar y abordar los síntomas cuanto antes.
La detección precoz de síntomas del tracto urinario inferior en la farmacia es clave para derivar cuanto antes a los pacientes para su correcto diagnóstico y seguimiento.
Además de la detección de los síntomas, ofrecer información y consejos relacionados con la incontinencia urinaria y su medicación, el farmacéutico también es importante a la hora de fomentar la adherencia terapéutica, aspecto fundamental para la mejora de la calidad de vida.
En algunos casos, el farmacéutico incluso puede trabajar conjuntamente con otros profesionales sanitarios implicados en el control de los síntomas del tracto urinario inferior: urólogos, rehabilitadores, fisioterapeutas, etc.
Desde la oficina de farmacia se ofrece un apoyo útil y muy importante a las personas con incontinencia urinaria, ejerciendo una labor informativa y de seguimiento:
Además, como la incontinencia urinaria se relaciona con emociones y sentimientos negativos de impotencia y rabia, el farmacéutico puede ayudar ofreciendo una atención cuidadosa y adecuada a cada circunstancia.
También, teniendo en cuenta que la incontinencia urinaria es un problema infravalorado e infradiagnosticado, y que los mismos afectados no suelen consultar al médico por vergüenza o por creer que se trata de una consecuencia del envejecimiento, los farmacéuticos pueden desempeñar un papel fundamental en su detección.
La recomendación de los absorbentes desde la oficina de farmacia.
La labor informativa del farmacéutico sobre la utilización de los absorbentes es fundamental. A la hora de recomendar los absorbentes, el farmacéutico deberá tener en cuenta los factores físicos y psicológicos, las necesidades específicas y conocer el momento vital de cada persona.
Se debe recomendar el absorbente que proporcione mayor eficacia y seguridad, de absorción rápida y que evite posibles efectos adversos provocados por la orina, como la dermatitis y los problemas cutáneos.
Algunas recomendaciones que puede hacer el farmacéutico a los pacientes que utilizan absorbentes:
El deber fundamental de los farmacéuticos es aplicar sus conocimientos y capacidades para apoyar y fomentar la salud y el bienestar de la población.
Desde aquí todo nuestro reconocimiento a los profesionales farmacéuticos que trabajan incansablemente para mejorar la calidad de vida de las personas. Son un ejemplo de profesionalidad y entrega desde cualquier ámbito de actuación donde trabajen.
Bibliografía: